**MONOPOLIO**


«EXPLORANDO»   

----- Un grupo de clérigos estaba reunido para decidir si debía o no invitar a Dwight Moody para su ciudad. El éxito del afamado evangelista había despertado la atención de la iglesia en aquella ciudad.

- Uno de los ministros presentes, que se decía no impresionado con lo que hablaban del predicador, comentó:

“¿Tendría el Sr. Moody monopolio sobre el Espíritu Santo?”

----- Otro hombre, calmadamente, contestó: 

“No, pero parece que el Espíritu Santo tiene monopolio sobre el Sr. Moody.”

«REFLEXIONANDO»
----- Muchas personas propagan ser “poderosas” en las manos de Dios, “tener la llave del poder de Dios”, “tener una oración fuerte” que resuelve todo, y así por delante. Estamos cansados de oír todo eso en emisoras de radio, televisión y otros canales de medios de comunicación. 

- No las queremos juzgar, pero lo mejor sería que dijesen que son apenas “instrumentos simples” en las manos de un Dios poderoso, que todo puede y que tiene placer en bendecir a aquellos que lo obedecen y que en Él confían.
Maravilloso es oír a alguien decir que somos diferentes, que tenemos un semblante que irradia paz, que tenemos un brillo que disipa cualquier sombra, que testificamos, verdaderamente, del Dios que proclamamos.

----- Dios dijo a Abraham: “Serás bendición”. Eso debe ser el máximo anhelado en nuestras vidas espirituales. Eso basta para que seamos felices y más que vencedores. No hay depresión para aquéllos que son una bendición. No hay angustia y frustración para aquéllos que son una bendición. No hay derrotas para aquéllos que son una bendición.

- ¿Ha usted dejado al Señor usar su vida? ¿Ha aceptado Su dirección? ¿Ha dado a Él la gloria qué Le Pertenece? O ¿Ha sido consciente de lo que Dios ha hecho en usted?
Me he esforzado para que mi vida esté bajo el monopolio del Señor Jesús. ¿Y usted?

- “Y haré de ti una nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás bendición” (Génesis 12:2)

Este fue un espacio más de: EXPLORANDO Y REFLEXIONANDO con el hermano Humberto Maravilla.
   -. Te invitamos para que te unas a nuestra próxima expedición a través de la Palabra de Dios para que juntos exploremos y descubramos nuevas enseñanzas para nuestro crecimiento espiritual.

¡Hasta la próxima y que Dios te bendiga!

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